¿Qué es el duelo en la psicología?
Si deseamos saber la etimología de la palabra duelo, la Real Academia Española nos indica que se trata del lat. tardío dolus y significa ‘dolor’.
El duelo es una reacción normal a la pérdida de un ser querido, objeto o evento significativo. En este sentido es muy importante mencionar que a lo largo de la vida se experimentan pérdidas, pueden asociarse a situaciones diferentes, tales como la carrera que no pudo estudiarse, los hijos que no existieron, la vida planeada que esperabas y no pudo ser vivida, las mascotas que no cuidaste, los seres queridos que pretendemos tener siempre, el círculo sólido de amigos que en algún momento deseas construir, un trabajo estable que permita desarrollar cada una de tus metas, pérdida de las expectativas o algo inesperado que cambia de manera súbita la forma de transitar la emoción a partir de la dificultad para elaborar la aceptación de algo que no quería perderse.
¿Cómo se manifiesta un duelo?
Estas son las formas más comunes en que puede expresarse un duelo:
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- Tristeza profunda.
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- Cansancio o pérdida de la energía o el interés.
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- Falta de entusiasmo de manera genuina o real.
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- Cambios en los patrones de sueño y alimentación.
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- Enfermedad física constante o debilitamiento general.
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- Baja concentración.
¿Cuánto dura la etapa del duelo?
Tomando en cuenta que para cada pérdida existe una significancia que se va otorgando a partir de lo que sucede en la vida personal y cotidiana de un individuo, el duelo no tiene un tiempo definido pues básicamente se tomarán en cuenta momentos, recuerdos, si fue inesperado o esperado, circunstancias, tareas pendientes que quedaron con esa persona y los hechos resueltos.
Las emociones no son lineales: en muchas ocasiones el duelo se caracteriza por experimentar varias emociones en un mismo momento, por lo que pueden presentarse las etapas de duelo en diferentes instantes hasta llegar a la aceptación de este acontecimiento.
¿Cuáles son los tipos de duelo?
De acuerdo con psicología, la clasificación que es tomada en cuenta es: duelo patológico, duelo complicado o duelo sin resolver; sin embargo, es importante tomar en cuenta los indicadores antes mencionados para no encasillar el duelo como parte de un tiempo, espacio o momento; sabiendo que el hecho ocurrido cambió la vida de manera contundente y también da oportunidad para saber que en cualquier momento podemos perder, dará la posibilidad a transitar el duelo desde su propia óptica.
¿Cuáles son las fases del duelo en psicología?
De acuerdo con el trabajo realizado por Elisabeth Kübler Ross, se destacan cinco etapas, aunque actualmente se suma una nueva etapa relacionada a dar significado. Es importante aclarar que estas no se presentan de manera lineal:
1.- Negación: Se presenta de manera súbita como emoción inicial ante una noticia impactante, los sentidos participan lo necesario para bloquear todo aquello que va ocurriendo en forma de defensa y protección; existe una tendencia por hacer a un lado lo que está ocurriendo y existen exclamaciones como ¡No puede ser! ¡No es cierto, están equivocados!
2.- Enojo: Esta emoción suele presentarse contra todo y contra todos e incluso hacia Dios, existen expresiones como “Dios se lo llevó porque necesitaba un Ángel”, “Dios sabe por qué hace las cosas”, “ahora ya Dios lo tiene a su lado”, suele ser el momento de dolor más agudo y se experimenta regresando constantemente a la misma etapa y estando consciente que lo único que quieres en ese momento es tener a tu ser querido a tu lado, el enojo puede desplazarse incluso hacia la persona que ya no está, diciendo “Cómo se atrevió a irse de mi vida”.
3.- Negociación: aparece en un momento en el que queremos cambiar o negociar con la vida para obtener nuevos resultados, “si no vuelvo a comer chocolates entonces la vida salvará a mi hijo”, aquí pueden entrar diferentes métodos de medicina, remedios caseros o paliativos que alivien la desesperación que se está experimentando en ese momento, por lo que es válido depositar la fe en las propias creencias; nadie puede decirte cómo vivenciar esta etapa pues en muchas ocasiones puede transitarse desde la propia esperanza.
4.- Depresión: Tristeza prolongada, llanto, desanimo “ya para qué” en esta etapa se manifiesta de manera contundente la rabia o el enojo hacia nosotros mismos; cabe mencionar que esta depresión es reactiva, derivado de la pérdida es necesario saber que no hay soluciones rápidas a pesar de que puede existir una presión social por sobreadaptarse a la situación. En caso de existir un estado de desequilibrio constante que haga inadaptativa la vida se sugiere el uso de antidepresivos siempre recetados por un psiquiatra, un factor importante para entender la toma de decisiones y el camino la recuperación.
5.- Aceptación: Al llegar a esta etapa se entiende que el duelo o la pérdida es irreversible y que, de alguna manera, a partir de elaborar todo lo que pasó, por fin logramos aceptar la realidad no desde el dolor sino desde el amor que esa persona forjó en nuestra vida al acompañarnos, observando de manera contundente que existe un futuro, nuevas metas y la posibilidad de sanar y recuperar la vida misma.
6.- Buscar significado: Consiste en construir un nuevo significado en la vivencia hacia la pérdida dándole mayor importancia al amor, buenos recuerdos, construcción en las estrategias de autocuidado que permitan continuar con la vida a pesar de la pérdida, encontrando un ¿para qué? y un ¿cómo? a partir de lo que dolió en algún momento.
¿Cómo superar un duelo?
El duelo no se supera, se acepta; por lo que es importante evaluar el acontecimiento, la importancia del ser querido en tu vida, recuerdos, circunstancias, actos realizados en vida e incluso las cosas que quedaron pendientes para con ello establecer el impacto que este hecho tiene en la vida de cada uno.
Se puede decir que es un proceso personalizado en donde a partir de las diferentes etapas del duelo se trabaja para ir transitando cada una de ellas, sabiendo que puede presentarse como una “montaña rusa” o un “sube y baja de emociones constante” hasta llegar a la verdadera aceptación de la pérdida.
¿Cómo trabajar el duelo en terapia psicológica?
Es esencial detectar las señales de alerta como apatía total, ideación suicida acompañada de planificación para realizarla, falta de atención en tu persona, descuido a personas que dependen directamente de ti o desatender las obligaciones u ocupaciones, y una vez detectadas se sugiere buscar acompañamiento terapéutico y consejería tanatológica que ayude a transitar el duelo con la finalidad de utilizar la tanatología como herramienta para elaborar una pérdida, sobrellevar la culpa y el enojo y reconocer las principales emociones predominantes en este proceso.
En Psicoterapia Integral PSIVI podemos brindarte la ayuda que necesitas para tu proceso de duelo: nuestra pasión es guiar al paciente al descubrimiento de su potencial personal y emocional para resignificar una historia de dolor en crecimiento y transformación.
Referencias
Real Academia Española – Duelo
Consultado el 11 de octubre 2024
Elisabeth Kübler-Ross. On death and dying. New York, Scribner, 2003 (orig. 1969), 286 p.